El pasado Martes día 24 tuve la oportunidad de asistir a una jornada, organizada por la Cámara de Comercio de Valencia, sobre las alianzas empresariales como instrumento de crecimiento de la Pyme. Para mí lo más interesante de la tarde, fue escuchar a Lidón Avinent contándonos su experiencia empresarial al frente primero de la empresa
Recerca Agrícola y luego de
SynTech Research Spain.
Es un ejemplo de oportunidades bien aprovechadas. La primera oportunidad se produjo cuando en 1994, cuatro trabajadores bien formados, se dan cuenta que las empresas fabricantes de productos fitosanitarios están externalizando los servicios de investigación y laboratorio. Fue su gran oportunidad que han ido explotando hasta principios de esta década, cuando empiezan a tener más competencia por el propio proceso imitador y cambios en los mercados.
En efecto, a ese incremento de la competencia se une la influencia de la globalización de mercados, lo cual afecta a Recerca Agrícola, hasta el punto de que empieza a perder algún trabajador preparado. En paralelo los clientes, ya internacionales, demandan una gestión global con un mismo interlocutor.
Dijo Lidón Avinent que en esas estaban, cuando de repente, una mañana recibe una comunicación de una empresa americana (SynTech Research) interesada en saber que hacían y si les interesaría unir esfuerzos.
Es la segunda oportunidad que en estos momentos están explotando, después de haber pasado el primer año 2004 de “noviazgo” y los cuatro siguientes profundizando y mimando la alianza estratégica.
Un esfuerzo grande pero que merece la pena, pues también les permitió aprender a compartir y desarrollar intereses comunes, así como alimentar la CONFIANZA para hacer funcional la relación. A pesar de ello siempre existen algunas dudas que sólo es posible minimizar tratando de hacer visibles los intereses comunes a corto plazo y cultivando la confianza.
Sin duda, el objetivo perseguido, COLABORAR para COMPETIR, ha sido conseguido. La empresa americana ha proporcionado más desarrollo de Marketing, acceso a clientes internacionales y algo de capital para crecer y la valenciana ha puesto un equipo cohesionado y bien formado al servicio de la estrategia de crecimiento y ello con poco esfuerzo inversor por ambas partes. Sin duda, la clave de la mejora competitiva, sumar para multiplicar, gracias a la obtención de grandes SINERGIAS y a lo que Cordón y Vollmann denominan el poder del dos.
Así de sencillo, pero con un gran trabajo de adaptación cultural por ambas partes, también mucha transparencia, dejar de mirarse al ombligo, perder identidad individual en favor de un proyecto colectivo y saber que la toma de decisiones son compartidas y más lentas.
Finalmente, la ponente acabo diciendo que las dificultades son la vida (no existen dificultades en el cementerio diria yo) y me gusto que al final dijera un par de cosas más: primero que el proceso es altamente positivo desde el punto de vista del APRENDIZAJE y que hay que vencer el MIEDO AL CAMBIO pues un proceso de este tipo requiere cambios en profundidad a todos los niveles.
Un refrán que vale para referirnos al proceso de internacionalización de la Pyme. Así mismo, tiene razón la cultura china cuando, para definir la crisis, lo hacen paradójicamente con significado de peligro y oportunidad. Bueno, aunque es una expresión muy “sobada” viene a cuento recordarla al hablar de la
ineludible necesidad de afrontar la internacionalización.
En efecto, tengo la impresión que esta crisis, esta haciendo más por la internacionalización de las Pymes españolas, que el conjunto de las campañas, programas y demás actuaciones de sensibilización realizadas por las instituciones nacionales (ICEX, Consejo de Cámaras, etc.) y autonómicas (IVEX, Cámaras de Comercio, etc.) dedicadas a facilitar la internacionalización de las pymes españolas y valencianas, con lo cual se esta generando una gran oportunidad.
Y la verdad es que la realidad confirma esa dificultad de las instituciones y colaboradores externos para lograr el objetivo internacional, pues por ejemplo actualmente:
Solamente el 1% de las españolas están internacionalizadas frente a un 3% de media en la UE, además la media de negocio internacional de las principales empresas españolas es de poco más de un 40%, lo que se traduce en que casi un 60% de su facturación sigue dependiendo del mercado interior.
Apenas un 3,2% de las empresas valencianas registraron alguna venta en el exterior a lo largo de 2008. El número de empresas exportadoras habituales es todavía menor.
Los productos de alta tecnología representan sólo el 6% del total de las exportaciones, mientras que en Alemania suponen el 15%, en Francia el 20% y en Reino Unido el 23%
Solamente 40.000 empresas españolas exportan con regularidad cuando existen más de 2 millones y el 75% de las exportaciones va a países de la UE. Por lo tanto, es muy probable que si vendemos a nuestros vecinos también podamos hacerlo a otros países, incluso con mayor facilidad.
Finalmente un grito “ Hay que buscar mercados en Nigeria, en Angola, en la India, en Panamá, en Colombia…”, lo dio Juan Carlos Muñoz, presidente de la Asociación Nacional de Industriales y Exportadores de Muebles de España (ANIEME). Apeló con vehemencia a los industriales a expandir sus mercados en la dramática intervención que protagonizó el miércoles 4 de noviembre en el congreso sobre comercio y distribución del mueble que organizó el instituto tecnológico de la madera (Aidima) con ocasión de la feria de la madera y su maquinaria (Fimma Maderalia).
Por lo tanto, siguiendo con los refranes “no hay mal que por bien no venga”, hasta el punto que los profesionales que desde hace más de una década emprendimos el camino de prestar servicios de internacionalización a Pymes y Organizaciones, de pronto nos encontramos con un inusitado interés por vender en el exterior.
Sin embargo, al entorno de la oportunidad, acuden todos: con o sin experiencia, oportunistas o no oportunistas, de corto o largo, serios o de pelotazo, con servicios perfeccionados por la experiencia o recién llegados, etc.
Por ello, es importante que las PYMES hagan el pequeño esfuerzo de comprobar, antes de apoyarse en servicios externos, la trayectoria de esos profesionales y su red de contactos durante la última década.